La ruta es una intervención que nace de un análisis de protección. Provee información para enfrentar riesgos, reducir vulnerabilidad y fortalecer las capacidades de personas migrantes, especialmente las mujeres. La iniciativa combina formaciones acerca de derechos, riesgos y servicios. Adicionalmente, ofrece un espacio personalizado para brindar primeros auxilios psicológicos y entrega una ayuda tangible y transferencias monetarias para responder a necesidades urgentes de salud sexual y reproductiva, alimentación y transporte seguro. La Ruta también dispone de un mecanismo de referenciación y activación de casos de riesgo a otras instituciones u organizaciones y un taller para la planeación de viaje.
Estos servicios son entregados con base en las condiciones de vulnerabilidad y necesidades de las personas migrantes que lo necesitan. Junto a estas acciones, la Ruta de Protección genera evidencias para acciones de influencia ante medios de comunicación, autoridades del gobierno, agencias y arquitectura humanitarias, organizaciones de la sociedad civil y el sector privado.